Adam Craley es el modelo estrella de la agencia “Prestige” la más importante de la industria de la moda en Londres. Es guapo, joven y atractivo, él lo sabe y no duda en sacarle partido para conseguir todo lo que quiere incluido la atención de las mujeres más bellas, no hay nada ni nadie que se le resista… excepto una fotógrafa rebelde que siempre parece llevarle la contraria y a la que le encanta molestar y enfurecer. Lynn es una mujer a la que le encanta su trabajo y que odia perder el tiempo. No le presta demasiada atención a su aspecto físico ni le importa la opinión que los demás tienen de ella. Siempre ha trabajado duro para conseguir sus metas y sus sueños sin dejar que nadie se interponga en ellos.
Adam y Lynn no se soportan a pesar de verse obligados a trabajar juntos, ella no soporta su egocentrismo y él no soporta su falta de feminidad. Sus continuos enfrentamientos no pasan desapercibidos ante sus amigos que no dudan en proponerlos un reto, tratar de seducir y doblegar el orgullo del otro. Lo que comienza como un excitante juego de tentaciones peligrosas pronto amenaza con salirse fuera de control porque ninguno de los dos está dispuesto a perder ni a dar su brazo a torcer
